El cuarto rojo de Bruno era un espacio que parecía haber sido diseñado específicamente para explorar los límites del placer y el dolor. La primera cosa que noté al entrar fue la iluminación tenue y rojiza que parecía envolver todo en una atmósfera de pasión y sensualidad.
Las paredes estaban adornadas con herramientas y accesorios que parecían haber sido diseñados para el placer y la restricción. Vi cadenas, cuerdas, y dispositivos que parecían haber sido creados para estimular y controlar el cuerpo.
En el centro de la habitación, había una gran cama con una estructura de madera oscura y adornos de cuero. La cama parecía haber sido diseñada para permitir una variedad de posiciones y restricciones, y había varias herramientas y accesorios dispuestos alrededor de ella.
En una esquina de la habitación, vi un gran armario que parecía contener una variedad de ropa y accesorios de cuero y látex. Había también una gran mesa de madera oscura que parecía haber sido diseñada para permitir la ex