Capítulo 40. Wapi
Valeria Montenegro siempre fue un dolor de cabeza para los padres de Ximena. Desde muy joven fue rebelde y la oveja negra de la familia. Le encanta romper las reglas y causar problemas sin ninguna razón ni necesidad.
Ximena estaba dormida cuando Valeria llegó muy tarde a su habitación. Abrió la puerta y se acostó junto a ella estando muy ebria.
—Apestas a cigarrillos—, reclamó Ximena en voz baja para que sus padres no pudieran oírla.
—Es por eso que estoy aquí—, confesó Valeria—, Papá y mamá no pueden verme así.
—¿En dónde estabas? Es muy tarde.
Ximena miraba la hora en la pantalla de su teléfono.
—Estuve toda la noche con él—, confesó Valeria con una risa emocionada.
—¿Con Alexio?
—Si...
—Mamá y papá dicen que es un vago sin futuro—, interrumpió Ximena.
—¿Qué saben papá y mamá?—, dijo Valeria fastidiada—, Son un par de aburridos.
—Quizás tengan razón. Ellos siempre quieren lo mejor para tí.
—Suenas igual a ellos.
Valeria se levantó con un poco de esfuerzo y se sentó al bord