POV: Danika Klein
Negué con fuerza una y otra vez, como si el simple hecho de hacerlo pudiera borrar todo lo que estaba pasando. Miré a Helena con los ojos desbordados de miedo, de rabia, de impotencia.
—No puedes hacer esto —le dije, la voz me temblaba, pero aun así intenté mantenerme firme—. No me voy a casar con ese hombre. Estás loca. ¡Déjame ir!
Pero mis súplicas solo parecían divertirla. Volvió a acercarse a mí con paso firme, decidida, y me agarró la cara con fuerza, apretándome las mejillas como si quisiera aplastarme.
—Demasiado tarde, maldita —escupió—. Tuviste tu oportunidad de escapar de todo esto… de alejarte de Credence. Pero no lo hiciste. Así que ahora, aguanta las consecuencias.
Sentí las lágrimas correr por mis mejillas sin control. Quería gritar, correr, desaparecer. Pero no podía moverme. Estaba atada, atrapada… y sola. Vi cómo ese hombre, no dejaba de mirarme de arriba abajo. Me observaba como si fuera un objeto, algo que estaba ansioso por degustar . Me revolví