Dentro de una camioneta, sin saber a dónde pararía era la constante en la vida de Cala desde que Blake había decidido que ella lo acompañaría en su camino, parecía estar destinada a solo seguir los pasos de su captor, sus emociones no tenían importancia, y mucho menos sus deseos, solo estaba ensimismada, y parecía que en el futuro las cosas no cambiarían del todo.
Varias horas por carretera, hasta llegar al aeropuerto, fueron un infierno y esta vez no solo para Cala, los tres hombres que la acompañaban, se veían abrumados, no todo había salido como estaba planeado, y mucho menos para Blake.
Huía como un exconvicto y ciertamente no era algo a lo que él no estuviera acostumbrado en todo caso, había sido él pan de cada día desde hacía años, en ese momento mientras iban a toda velocidad, Blake recordaba, sus antiguas aventuras, sus fracasos y los aprendizajes de todo lo vivido, él no había llegado al poder por un simple golpe de suerte, o tal vez si.
Todo en su vida se lo había ganado