BLAIR

La noche había sido un carrusel de sentimientos y situaciones bastante irreales.

Sin embargo, Rhett se las había ingeniado para hacerme olvidar toda la sangre y las muertes.

El dolor que aún cosquilleaba en el fondo de mi alma por haber terminado mi vínculo con Riley de esa manera tan atroz.

Ahora estábamos en esta cabaña de ensueño, aislados de todos, solo él y yo…

Recostada a la puerta de la habitación, mi cuerpo entero se iba calentando al escuchar los gemidos roncos que salían del cuarto al otro lado del pasillo.

“Eee, creo que deberías aclararle a ese lobo pervertido que conmigo tu oído ha mejorado al cien por ciento.”

“¿Por qué no te vas a dormir un ratito, Amy?” Torcí la boca ante sus palabras burlonas.

“Claro… me voy a cerrar los ojitos para no ver las puercadas que van a hacerte más tarde, niña inocente.”

Bufó, riéndose un poco más de mis aprietos, pero me dejó tranquila.

Creí que los sonidos excitados de Rhett también cesarían cuando Amy dejara de prestarme su poder, p