14. UN PERVERTIDO EN MI CUARTO

BLAIR

Algo se retorció en mi pecho.

Casi sentí la necesidad de aullar.

Era como si estuviese llamando a mi parte más primitiva, a la loba que nunca apareció.

Me levanté y me incliné sobre la baranda; el viento azotaba mi cabello negro.

No podía dejar de mirarlo. Era hermoso.

Se veía tan poderoso, indomable.

La brisa me trajo su olor embriagante y, por primera vez, se sentía liberado, sin reprimirse, sin ataduras…

Café puro cargado con ron aromático y canela… así lo percibía mi nariz.

Amargo y dulce, complejo, delicioso para todos mis sentidos.

Levantó el morro y aulló profundamente, haciéndome estremecer.

Mi cuerpo entero temblaba.

Me llevé la mano al corazón, sintiéndome rara, como nunca antes.

Algo rascaba por salir a la superficie, pero lo sumergí con miedo a liberar a Amy.

—¿Rhett? —pregunté en voz baja.

Lo sabía, sabía muy bien que era él, su forma animal, el Alfa.

Pero sus pupilas lobunas me dieron una última mirada, tan intensa y salvaje que el mundo pareció detenerse.

Llena de
Sigue leyendo este libro gratis
Escanea el código para descargar la APP
Explora y lee buenas novelas sin costo
Miles de novelas gratis en BueNovela. ¡Descarga y lee en cualquier momento!
Lee libros gratis en la app
Escanea el código para leer en la APP