CAPÍTULO 11

Más ajustado —le pide Estefanía al modista.

Siento que el aire se escapa de mis pulmones. No sé cómo, pero cuando llegué a mi oficina Estefanía ya estaba dentro. Me dejó con la boca abierta, ya que se las arregló para entrar en ella sin que nadie se diera cuenta.

—Ya, por favor —suplico e intento respirar.

—¡Dios mío, cariño, tienes que adelgazar un poco! Ninguno de los modelos te cierra en el estómago —comenta el diseñador, asustado.

—¿Cómo quiere que cierren si son unas tallas menos que la mía? —balbuceo y los observo.

—Está bien —suelta Estefanía de mala gana—. Tráigame vestidos de talla 5.

—Ay, no. ¿Es en serio, Estef?

—Sí. Paolo, tráeme vestidos de la talla 5.

—Ay, está bien. Enseguida te los consigo, querida.

Él chasquea sus dedos y una de sus empleadas sale en busca de los vestidos.

—Estefanía, ¿no crees que es muy pronto para buscar vestidos de novia?

—No, querida cuñada. Mientras más pronto, mejor

Continue lendo este livro gratuitamente
Digitalize o código para baixar o App
Explore e leia boas novelas gratuitamente
Acesso gratuito a um vasto número de boas novelas no aplicativo BueNovela. Baixe os livros que você gosta e leia em qualquer lugar e a qualquer hora.
Leia livros gratuitamente no aplicativo
Digitalize o código para ler no App