Hola :D pronto subire otro cap
POV Dimitrik RudakovDos días habían transcurrido desde la operación cuando lograron controlar el sangrado de Darianna y también tuvieron que hacer frente a un casi colapso en el pulmón. En ese momento, experimentaba un gran nivel de estrés, ya que al no ser un pariente cercano de Darianna, no tenía la autoridad para tomar decisiones en su nombre. En ese momento, me encontraba sentado junto a ella en la habitación, tomándole la mano. Los médicos afirmaban que padecían una infección en los pulmones y que era muy probable que necesitaran una cirugía. Tenía la intención de trasladar a Darianna a un centro médico de renombre, pero encontraba dificultades para hacerlo. Hasta ahora había pasado todas esas horas sin dormir, lleno de inquietud pues no despertaba.—¿Qué tal estás?Levante la vista notando a Nikolai. El se había estado encargando de todo descubriendo que si teníamos una rata…Veronika. Ella había estado siendo torturada personalmente por Nikolai al punto de cortarle la lengua, p
Abrí los ojos poco a poco, percibiendo una suave presión en mi mano. Movía la cabeza de un lado a otro experimentando un peso horrible en mi cuerpo. Notaba que en mi alrededor me encontraba en una sala cubierta de blanco junto a unos aparatos que sonaban uno tras de otro. Intenté mover mi mano, pero no pude hacerlo. Levanté la mirada al observar a Dimitrik a mi lado, quien levantó su cabeza gradualmente. Nuestra mirada se cruzó y experimenté una electricidad en todo mi cuerpo que me hizo estremecer un poco.El se alzó con una rapidez asombrosa, abrazándome con intensidad.—Creí que te había perdido, Krloik (conejita). —Murmuraba con calma. —No despertaste, me causaste mucha preocupación.—¿Estamos en el hospital? Mi voz sonaba como un leve murmullo. Me esforzaba por hacer que mi mente recordara. Había causado una matanza, hablaba con Dimitrik y Nikolai y tras esto un disparo.—Si es así, krolik (conejita) requieres someterte a una intervención quirúrgica. Traere a un medico para que
POV Dimitrik RudakovEsa misma noche habían trasladado a Darianna para el retiro del pulmón, gracias a su padrino pudieron conseguir uno en el mercado negro. Con la suma de dinero que entregamos al hospital, nadie se atrevió a hacer preguntas; simplemente comenzaron la operación. Estaba allí, con las manos en los bolsillos, contemplando la luz de la pantalla que iluminaba mi mundo. Habían entrando en cirugía y mi cuerpo estaba a punto de pasar por un colapso nervioso.Ella ha sido la única mujer que he querido algo mas que solo mero físico.Yo fui quien le propuso que solo disfrutáramos de nuestro deseo físico…y aquí me encontraba, anhelándola en mi corazón como si fuera mi mujer.Unos pasos firmes resonaron a mi lado, levanté la mirada y me di cuenta de que era el padrino de Darianna. —La tienes completamente enamorada. —Benjamin susurró, sus ojos fijos en la puerta tras la cual se llevaba a cabo la cirugía.—¿Por qué tienes esa idea en tu mente? —Mientras estábamos siendo trasladad
POV Dimitrik RudakovDurante esa semana, alternaba con Derek para cuidar de Darianna. Después de su recuperación, conseguimos un pase para la celebración de Dante Salvatore gracias a la ayuda de Benjamín. Al parecer estarían sus amigos más cercanos, pero aun así pudimos conseguir entrada donde Derek y yo fingiríamos ser conocidos lejanos. Lo único que debíamos hacer era mantenernos alejado de Dante y todo eso acabaría. Retiramos a Darianna del hospital, dejando que mi hermano Nikolai la cuide en una de nuestras viviendas. Tras esto me dirigía junto a Derek y Benjamin hacia el sitio de la celebración. Un lugar encantador lleno de opulencia y sofisticación, deslumbrantes luces resaltaban el atuendo blanco obligatorio. En el salón de celebraciones del hotel, los huéspedes mostraban sonrisas, sin sospechar lo que estaba por suceder. La música suave de jazz, las sonrisas, los susurros y las fragancias se mezclaban en armonía, en marcado contraste con la adrenalina que sentía en mi interior
POV Dimitrik MontenegroLa operación de Darianna se prolongó, lo que resultó ser mas de cuatro horas. Aun no había sabia donder estaba mi hermano el cual no tomo ninguna de mis llamada. Durante toda la operación permanecía en la sala de espera como si estuviera adherido a la silla. Uní mis manos y apoyé en ellas mi cabeza, y por primera vez en bastante tiempo...rezaba.Repetía la frase que mi madre solía indicarme antes de dormir. Intercedí por Darianna para que sobreviviera, me comprometí a darlo todo a cambio de que me fuera devuelta. Perdí la noción del tiempo mientras oraba, solo interrumpí mi rezo al notar un calambre en mis manos, las cuales estaban ligeramente pálidas por la intensidad con la que rezaba.Observó a Derek con la cabeza en alto mientras este se paseaba frente a la puerta. Los nervios me tenían al borde, urgía encontrar una distracción mental antes de sucumbir en ese sitio. Al despertar, me acerqué a Derek, quien me observó con gran desprecio. Me sujetaba de la cam
POV Dimitrik RudakovAgarraba con firmeza la mano de Darianna. Hacía aproximadamente un mes que ella permanecía sin conocimiento. Aunque le suspendieron el tratamiento, seguía profundamente dormida. Derek entraba por la puerta con una taza de café en la mano.—Sería conveniente que te retiraras a descansar, ya que estuviste a su lado durante toda la noche.—De acuerdo, —besaba su mano delicadamente mientras la tomaba. —krolik(conejita) volveré más tarde. Caminaba hacia la salida del hospital cuando decidí tomar un taxi para regresar a mi hogar. Mi cara lucía fatigada, mi barba se había alargado y apenas lograba descansar. Derek y yo nos alternábamos para cuidar a Darianna, quien siempre se encontraba dormida. Estando dentro del vehículo, aproveché una hora para descansar, un tiempo breve pero adecuado para despertar mis sentidos.Al llegar a mi casa notaba a Nikolai a punto de salir, su rostro estaba totalmente serio y al verme su seriedad no disminuyo.—Estaba a punto de ir por ti.
A través de los amplios ventanales, la luz solar se colaba en la habitación, inundándola con un resplandor acogedor y cálido. En la habitación, el aire llevaba consigo el delicado perfume de las flores que la inundaban, destacando sus tonos vivos frente a la atmósfera gélida del lugar. Me senté en una silla de patas doradas, y aunque el lujo me rodeaba, sentía cómo cada pétalo era un recordatorio de mi cautiverio. La puerta se abrió con un suave crujido, y una empleada, ataviada con un modesto uniforme, se aproximó a mí con una bandeja. Encima, unos aperitivos meticulosamente elaborados y una taza de té que humea. Sin embargo, no sentía ganas de comer. Dirigí la vista hacia la ventana, haciendo caso omiso de la bandeja como si comer significara recibir mi orden de muerta.—Piccola principessa(pequeña princesa) —Resonó una voz ronca y masculina que atravesó el silencio, impregnando el aire con su acento italiano. Sería conveniente que ingieras alimentos. Te aseguro que no he adulterad
En los últimos días, me di cuenta de que los trabajadores apenas se acercaban a mí y, en caso de hacerlo, lo hacían con utensilios de plástico. Exploraba la casa y observaba que la mayoría de las habitaciones estaban cerradas con llave. No tenía autorización para acceder a zonas adicionales como la cocina, lo que me limitaba las posibilidades de huir. Mientras estaba sentada en el sofa, un hombre de aspecto lánguido, cabello griseado y lentes que desprendían elegancia. —Señorita Montenegro he sido solicitado por el señor Bianchi para confeccionarle prendas a medida. Le solicitaré amablemente que me ayude y se ponga de pie para poder medir sus medidas.Mi mirada gélida estaba fija en él. —¿Mis medidas? —reía de manera visceral. —No voy a darle absolutamente nada.—Le ruego que me brinde su colaboración, señorita.Ignoraba lo que decían hasta que uno de los guardias se aproximó a mí. —Señorita Montenegro, es necesario que trabaje en conjunto con el señor Garrido, evitemos tener que hac