Anotó el día con letra enorme en la palma de su mano y salió de inmediato ¿Qué se suponía que debía hacer? ¿Darle un abrazo y felicitarla o algo así? La única vez que estuvo al borde de celebrar ese tipo de cosas, sucedió todo.
Apretó las mandíbulas y alejó los pensamientos dándole otra mirada a la palma de su mano. ¿Qué carajos debía hacer? ¿Buscar en internet o preguntarle a alguien? Salió hacia la cocina, mientras la palabra "especial" se repetía en su mente.
Debía verse como todo un imbécil pensando en eso y si sus amigos pudiesen verlo, posiblemente se suicidarían ante todas las tonterías que estaba haciendo y lo peor es que no quería pensar por qué las estaba haciendo.
—¿Sacarla a dar una vuelta y comprarle cosas? ¿Llevarla a comer y ese tipo de cursilerías?
Oh, miércoles. Mejor se callaba, porque decirlo sonaba más empalagoso que pensarlo. El humo de las cacerolas llamó su atención y sonrió al recordar el desastre que había resultado lo que se suponía que tenía que ser una sopa