Capítulo 116:
Las explosiones resonaban en la ciudad que se oscurecía, mientras los edificios se iban derrumbando uno a uno. La lucha entre luz y oscuridad estaba en su clímax.
Elbanius, armado con bombas de luz, pudo mantener a raya a los vampiros que habían sido creados por Darían. Tras una imprevista gran explosion, cayó al suelo rajado al girar hacia atrás una ola de esa explosion, lo desintegra junto con una docena de criaturas sedientas, por más que intentó cubrirse usando la puerta de metal como escudo.
Su sacrificio dejó un vacío, y sus últimas palabras él murmuró, “Luchad hasta el final”, quedando suspendidas en el aire como un eco de resistencia.
En tanto, las llamas perpetúan devorando los restos de la ciudad que cedía ante una inminente lluvia ácida, mientras el suelo silbaba al contacto del suelo. A su alrededor, Lionel, cubierto de heridas, con la ropa empapada en sangre, respiraba con dificultad. Su mirada feroz no se apagaba a pesar del dolor que le desgarraba el cu