Gaby sale de su casa vestido con un jean desgastado, una camiseta negra de cuello redondo y una chaqueta de cuero, listo y preparado para llegar a ese antro, buscar a más de una mujer, tres si es posible, para terminar con su puta frustración y dejar de pensar en Noe. No había remordimiento, él tenía que hacer algo para no terminar con Noe y esperar que todo se vaya al carajo en un abrir y cerrar de ojos. Al subir a la camioneta la enciende haciendo rugir el motor y venta tan rápido de ahí que las marcas de las llantas quedan grabadas en el asfalto, antes de arrepentirse y volver a su cueva.
A los veinte minutos estaba estacionando frente al antro y sin querer pensar mucho en lo que estaba haciendo apaga el motor y decide bajarse, pero antes de poder salir del auto la música de Barry Manilow con la canción Mandy hace eco dentro de la camioneta. Él morocho busca con la mirada tratando de localizar de donde proviene la música. Guiado por su oído llega al asiento del pasajero, bajan