Mundo ficciónIniciar sesiónEl café se derramó sobre los documentos cuando Valeria golpeó la mesa con el puño. Sus ojos, normalmente serenos, ardían con una furia apenas contenida mientras miraba la pantalla de su ordenador.
—¡Mierda! —exclamó, ignorando las miradas de los empleados que pasaban junto a su oficina.
La noticia en la pantalla era clara: los detalles confidenciales del proyecto Artemisa, su propuesta más innovadora para la campaña de Costa Enterprises, habían sido filtrados a la competencia. No eran simples rumores; el artículo incluía especificaciones que solo conocían las personas de su círculo más cercano.
Valeria se levantó y cerró la puerta de su oficina con un golpe seco. Necesitaba pensar. La traición era evidente, pero ¿quién? Repasó mentalmente la lista de personas que tenían acceso a esa información: su equipo creativo, Enzo, algunos ejecutivos de confianza y... Sebastián, quien había insistido en conocer los detalles cuando se ofreció a invertir en su







