Capítulo 39.
Kara había averiguado muy poco de boca de su madre. El lobo había naufragado en algún punto de los últimos cuatro años y llegado a las costas del territorio uno. Tenía una muy conveniente pérdida de memoria; un mercader lo acogió, juntos mejoraron no solo el negocio sino la vida de todos los lobos de su muy pequeña comunidad y desde entonces no hizo más que hacer contactos. El tipo se veía bastante capaz, así que cuando la madre de Kara oyó sobre las hazañas del lobo por parte del mercader con el que tenía algunos negocios, no dudó en apostar por él.
-Un santo. Todos los que lo conocen en el territorio uno lo aman. - Dijo Kara divertida. - Y solo no está en mi album de posibles parejas porque no es noble. Increíble. Creo que el plan de mamá cuando lo nominó para el puesto era volverlo noble y luego presentármelo.
-Suena como algo que haría la Consejera Diist. - Asentí. - Una lástima que ya tengas una pareja.
-¡Ja! Es lo mismo que dijo ella. Y no fue sarcástica al respecto. "Un p