Valentino.
Mis manos se detienen en las de Ariel casi enseguida.
—No quiero ningún regalo de tu parte. No necesito ningún regalo de cumpleaños de tu parte.
—¿Por qué? —Pregunta sorprendida de mi parte—. Nunca quise molestarte con mi presencia en la casa y ahora…
—Sabes más que nadie que no dejo entrar a nadie a mi casa. Fui claro contigo hace cuatro años, te consideraría mi amiga, y ambo tomaríamos rumbos distintos. Has hecho tu vida con otro hombre y yo estoy enfocado en el negocio. No tenemos ninguna relación.
Ariel y yo habíamos tenido un pasado juntos, fue importante para mí y la ame con todo lo que mi corazón pudo ofrecerle, sin embargo aquellos recuerdos que construidos juntos desaparecieron cuando ambos decidimos terminar nuestra relación, prometimos que seguiríamos nuestra vida por caminos separados. Prometimos ser felices a nuestra manera. Yo por el contrario me centre en el negocio familiar, en seguir el trabajo de mi padre, en convertirme en lo que soy.
Me cerré por mucho t