—No haces más que decir mentiras y desprestigiar a tus mayores, ¡¿de qué forma te están criando para que seas desalmado con tus palabras?! —Grita indignado, tratando de tapar el sol con un dedo.
Sí que le preocupa su reputación, pero si quería conservar su dignidad, no debió meterse conmigo en primer lugar y tratar de manipularte. Tampoco debió pensar que podía quedarse con lo que es mío por derecho, y espero que esto se quede grabado en la memoria de todos, porque protegeré aquello que me dejaron mis padres hasta que mi heredero sea capaz de hacerlo.
—No es necesario gritar, estamos conversando. —Hablo retador mientras estiro mi mano a mi espalda, donde Gio me entrega un folder lo suficientemente grueso —. Sigue insistiendo con que digo mentiras, pero realmente me pregunto ¿quién es el que está engañando realmente aquí?
Sin cuidado le doy el folder, pero en cuanto lo toma, su contenido se proyecta en la pantalla grande en forma de video, donde cada miembro de su familia se muestra si