Mi nombre es Isabel Iraola, soy ginecóloga en la clínica Ruber International, tengo 29 años y estoy soltera luego de una gran desilusión amorosa que acabó casi con mi autoestima.
Trabajo junto con mi hermano, Santiago Iraola, o como lo llama todo el plantel femenino “el doctor sexy”, él es el jefe de traumatología y de emergencias, somos buenos amigos y mejores hermanos ya que somos mellizos. En el trabajo es muy estricto hasta conmigo pero fuera de él es mi mejor amigo.
Dentro de la clínica tengo dos mejores amigas con las cuales somos como uña y carne, por un lado esta Amanda Menéndez, la cual es mi amiga desde el comienzo de nuestra carrera y es especialista en neurología y por otro lado está Catalina Ramírez, que es la nueva adquisición de la clínica, es traumatóloga como mi hermano recién egresada de la facultad de medicina y el único defecto que tiene es que esta perdidamente enamorada de mi hermano.
También gracias a mi trabajo me he hecho de buenas amigas, ex pacientes que siguen en contacto conmigo luego de haberlas ayudado a formar sus familias, me siguen invitando a salir, almorzar, ser parte de su círculo de amistades y me han invitado a eventos de honor como casamientos, bautismos o cumpleaños. En este círculo están Julietta Pedraza, Evangelina Ramírez, María Cairoli y Sofía Gutiérrez.
Hubo un momento en el que pensé que había encontrado al amor de mi vida, creí estar enamorada, él era un médico residente que estaba haciendo prácticas en la unidad de cardiología en la cual Amanda es la jefa, ella nos presentó pensando que podía haber hallado al hombre perfecto y el cual podría hacerme vibrar y cambiar mi manera de ser: que vivo por y para mi trabajo. Comenzamos a hablarnos, acercarnos con el tiempo, almorzar juntos y una cosa llevó a la otra y terminamos teniendo una relación bastante tóxica, la que terminó cuando lo encontré con los pantalones bajos y una enfermera de rodillas.
Esa fue la primera y única vez que me abrí a la posibilidad de encontrar el tan anhelado por todos “amor de mi vida” y fue una experiencia horrible que no quiero volver a repetir, no por haberlo encontrado en esa situación comprometedora sino por su actitud posterior en la cual me trató de frígida, loca, obsesiva por el trabajo, fría, entre otros calificativos que lograron quebrarme por dentro y herirme profundamente.
Hoy no me arrepiento de la decisión tomada, algún día encontrare al indicado, va a tener un trabajo muy difícil pues estoy totalmente cerrada al amor, lo mío hoy por hoy son “relaciones de una noche” las que satisfacen un interés primitivo pero no pasan de eso.
Mis amigas piensan que ya es hora es pasar página y volver a intentarlo….
Maximiliano Hamilton, para mis amigos Max, para mis socios Sr. Hamilton, para mis enemigos su peor pesadilla, para mis amantes un dios; esos son mis nombres. Tengo 32 años, soy mitad italiano, mitad inglés, tengo la sangre caliente italiana y los modales de un caballero inglés, a su vez, viví la mitad de mi vida en suelo español así que tengo una buena mezcla.
Heredé de mi padre el conglomerado de empresas de tecnología Hamilton Corporation con sede en Londres pero filiales en varias partes del mundo como por ejemplo en Madrid, Roma, Milán, Amsterdam, París, New York, Tokio, Sydney, entre muchos otros. Actualmente me encuentro en Milán solucionando algunos problemas en la matriz energética de la filial.
Soy el CEO de la compañía desde que mis padres fallecieron, en un accidente de tránsito que fue provocado como llamado de atención a mi abuelo materno Francesco Marchesetti, capo de la mafia italiana. Cuando ocurrió el accidente yo tenía 22 años y estaba terminando la carrera de ingeniería en electricidad en la Universidad de Madrid y debí mudarme con urgencia porque mi vida corría peligro al igual que la de mis amigos.
Mi abuelo ha sido mi pilar y mi héroe y quien me ha acompañado en todas las decisiones que he tomado hasta el momento, ya me ha avisado que cuando él muera yo voy a tener que ocupar su lugar dentro de la mafia italiana; algo que no me agrada para nada, por el momento soy su Don en el sindicato, la última voz la tiene él.
Dicen que soy un hombre frío, sin sentimientos, que paso trabajando y que a pesar de mi edad pienso que sigo siendo un joven de 20 años que pasa de cama en cama. Puede que sea así, sólo ha habido una chica que logró despertar algo dentro mío, cuando era un adolescente y vivía en Madrid… pero la cual no he vuelto a ver en 10 años, sólo se de ella por sus publicaciones en I*******m y porque su hermano es mi mejor amigo a pesar de la distancia.
(Llaman a la puerta de mi oficina)
- ¿Sí?
- Señor Hamilton, tiene una llamada del Sr. Iraola
- Perfecto, comuníqueme
- En un segundo por la línea 1.
Hablando de mi mejor amigo, es como si estuviésemos conectados, casualmente me está llamando…
- Buon giorno Max
- Buon giorno Santi, como stai?
- Bueno se me terminó el italiano amigo jajajaja, por ahora estamos bien, trabajando mucho pero bueno, es lo que hay.
- Lo imagino, por acá también estoy por colapsar con tantas cosas que tengo pendiente.
- ¿El abuelo?
- Ahí sigue con sus negocios y anunciando mi futura herencia.
- ¿Qué? Sigue con la misma idea
- Así es amigo, a ese viejo cascarrabias no hay quien le saque de la cabeza que yo tengo que continuar el legado, ya me ha metido sin que yo me de cuenta, en este momento soy su don dentro de la organización.
- ¡Maldición!
- Sí, pero bueno llegado el momento veré que hago. Cuéntame el verdadero motivo de tu llamado.
- Jajajajaja como me conoces…. Bueno en realidad son dos las razones de mi llamado: por un lado quería comentarte que le voy a pedir matrimonio a Catalina, o sea, me voy a convertir en un hombre decente jajaja
- ¿Qué? ¿En serio? Wow! ¡Felicitaciones! ¿Cómo está Catalina?
- Bueno ella está todavía no lo sabe, es una sorpresa, no se cuanto tiempo más se la voy a ocultar, hasta mi hermana sospecha que algo tramo.
- Mmmm… Isabel
- Así es… ¿sigues todavía enamorado de ella?
- No lo sé, además fue algo unilateral, ella nunca supo de mi enamoramiento… era solo el nerd del amigo de su hermano, nunca me vio como algo más.
- Ahora las cosas cambiaron… sos todo un sex symbol, todas quieren que las mires y poder lograr llevarte al altar.
- ¡Ni loco! Me dijiste que tenías dos noticias… ¿cuál es la segunda?
- Sos experto en cambiar de tema Hamilton…
- Jajajajaja pensé que me conocías Iraola
- Está bien, quería invitarte para que vengas a Madrid este fin de semana que viene, vamos a salir a bailar a uno de los mejores boliches, del cual capaz conoces al dueño... jajajaja y además quiero que seas el padrino de mi futuro enlace.
- Wooooo!! Vas a full con todo, quién lo diría el alérgico a las relaciones encontró su mitad y apuesta a lo grande.
- La verdad que sí, esa mujer rompió todas mis murallas, ojalá en algún momento tú lo logres.
- Veremos amigo que sucede.
- Escúchame van a estar Amanda y mi hermana.
- Y si, imaginaba que eso podía suceder, con Amanda todo bien, seguimos siendo buenos amigos y alguna que otra vez estuvimos juntos pero ninguno quiere nada serio, sabemos que no somos compatibles. Tu hermana es otro cantar, hace 10 años que no la veo en vivo…
- Ella es la mujer de tu vida, y sabes que tarde o temprano ustedes van a terminar juntos.
- Si tú lo dices….
- Bueno que dices, ¿confirmo tu asistencia?
- Déjame ver la agenda porque esta semana va a ser explosiva y todavía no sé cuándo volveré a Madrid, pero te aseguro que voy a hacer todo lo posible.
- Con eso me conformo por el momento, bueno te dejo trabajar.
- Dale, cuídate mucho bro!
- Tú también si no te voy a mandar a Isabel a que baje los decibeles de tu trabajo.
- Jajajajaja mándale un beso y dile que tengo muchas ganas de reencontrarme con ella.
- Ok se lo diré.
- No te creo… bueno nos vemos, en la semana te llamo para confirmar mi asistencia. Arrivederci!
- ¡Nos vemos pronto Max!
Creerán que estoy loco pero no veo la hora de volver a ver a Isabel Iraola y voy con la misión de conquistarla y hacerla mía.