Decidimos con Maximiliano casarnos en un lugar moderno, lejos de las iglesias tradicionales, por lo que elegimos quedarnos en Londres y casarnos en un lugar llamado “El Gherkin”, uno de los rascacielos más emblemáticos de Londres, ofrece un entorno moderno y lujoso para celebrar bodas. Situado en el corazón de la ciudad, el lugar ofrece vistas panorámicas de Londres desde sus últimos pisos, creando un impresionante telón de fondo para ceremonias y recepciones.
Allí, estuvimos acompañados de nuestros amigos más cercanos y nuestras familias. También integraban la selecta lista, los socios más confiables de Max, los cuales debían ser testigos de esta unión.
Decidimos no casarnos por la Iglesia Católica pues era irónico dado el mal estado de conexión con Dios.
Mi hermano ingresó primero tendiendo su mano para ayudarme a entrar. Era una mañana fresca de domingo. Un lazo blanco estaba atado en la parte superior del lugar. Significaba unión en la cultura italiana.
- Es toda una boda italia