Mundo ficciónIniciar sesiónEl carruaje se sacudía violentamente sobre el camino lleno de baches.
Cada golpe hacía que Clara gimiera débilmente, su cuerpo flácido en los brazos de Sophia. La sangre había empapado completamente sus vendajes, goteando sobre el piso del carruaje, creando charco que crecía con cada segundo.
—¡Más rápido! —Sophia gritó hacia donde Edward conducía—. ¡Se está muriendo!
—¡Vamos tan rápido como podemos! —Edward respondió, su voz tensa mientras azotaba las riendas—. ¡El camino está destruido! ¡Si volcamos, todos morimos!
Pero incrementó la velocidad de todos modos, los caballos galopando a ritmo que bordeaba lo suicid







