05. ¿Harías eso por mí?

Nova dio un paso atrás y luego otro. Ignorando el pastel tirado sobre el piso. Se había quedado en shock y por un momento creyó que estaba imaginándose cosas que no eran. Era imposible que Knox estuviese allí, justo al otro lado de la puerta.

No, el destino no podía ser tan cruel y menos ahora que finalmente había encontrado estabilidad y tranquilidad.

Pero el mundo era un jodido y pequeño pañuelo. Y sin saberlo, había terminado bajo la protección de Aiden Ridley. ¿Tenía idea su jefe de quién era ella? Rogaba al cielo porque el encuentro entre ellos fuese una verdadera casualidad.

El ruido de pasos detrás de la puerta la sacó abruptamente de sus pensamientos, corrió por el pasillo para esconderse detrás de una de las columnas para no ser vista. ¡No era una cobarde! Y tampoco tenía motivos para huir, no era ella quien había fallado. Además, no tenía ninguna intención de que Knox supiera que seguía embarazada. No podía exponer a su bebé de nuevo.

Entre el susto y