Cap. 18 ¿"Claro que sí"?
Cap. 18 ¿"Claro que sí"?
El informe no era un arma de un enemigo oculto. Era una cápsula del tiempo. Una prueba que su yo pasado había escondido, quizás la única prueba, para el día en que todo se derrumbara. Para el día en que ella despertara.
Todo cambiaba.
De repente, esto ya no era una guerra por venganza, por memoria o por libertad.
Era una batalla por la custodia de su propio hijo.
—No podemos decírselo a nadie. No todavía —diría Dayana, con una calma aterradora.
—Primero, copiamos este documento en diez lugares diferentes. Luego, tenemos que asegurarnos de que Dulce tenga el mejor cuidado prenatal posible. Llamamos a un médico de confianza de Felicia para que la "vigile". No por ella, sino por mi hijo. Y averiguamos discretamente… ¿Ares lo sabe?
Las tres horas de planificación se esfumaron en un instante. Ahora era guerra.
Cuando la puerta sonó, Dayana sintió un rugido de furia en su pecho. Ese hombre. Ese mentiroso. Abrió y, sin mediar palabra, lo agarró de la manga y lo arra