Mundo ficciónIniciar sesiónNo Pertenezco A Nadie
Los corredores de la mansión estaban silenciosos aquella tarde, iluminados tenuemente por las lámparas. Serena caminaba con pasos medidos, buscando un momento de tranquilidad antes de la cena, cuando una sombra se deslizó tras ella. Antes de que pudiera reaccionar, Damian la arrinconó contra la pared, sus manos firmes y frías sujetándola mientras la besaba con fuerza. Serena apretó los dientes para que no metiera la lengua y lo empujó tal como Teo le había enseñado en las clases de defensa personal.
- ¿Por qué… por qué ya no me buscas? - susurró con rabia, entrecortado - ¿Por qué parece que vives bien sin mí?
Serena, a pesar del choque, mantuvo la calma. Lo miró a los ojos, su voz clara y serena como el agua tranquila, aunque su cuerpo temblara por la cercanía.
- Mi vida est&aacu







