Punto de vista de Josefina

—Deja de luchar contra mí, Josi. —gruñó el doctor Alberto mientras me llevaba a través de una pequeña zona boscosa que conducía hacia los campos que bordeaban las fronteras. Mi mente entraba en espiral intentando ponerse al día, tratando entender qué estaba pasando exactamente. Mi compañero luchaba por su vida mientras yo era forzada a escapar.

—Tenemos que volver. —continué forcejeando dentro de su agarre. Enrique, necesitaba estar con Enrique.

El vínculo de apareamiento aún zumbaba entre nosotros, podía sentir que él todavía estaba vivo. Pero, ¿por cuánto tiempo más?

La desesperación se apoderó de mí mientras continuaba luchando contra la restricción no deseada del doctor Alberto, hasta que colocó mis pies firmemente en el suelo, agarrando mis muñecas para evitar que corriera de vuelta hacia el hospital.

—Solo podía salvarte a ti.

—¿Solo podía salvarme a mí? ¿Qué significa eso?

—Prometieron que te dejarían con vida. —declaró mientras comenzaba a arrastrarme