Punto de vista de Josefina
—¿Qué está pasando?
Lucas se acercó a mí mientras yo salía por la puerta principal con Lobo, tenía su casco de repuesto de la motocicleta en la mano.
—¡Vamos a dar una vuelta! —una sonrisa encantadora se posó en su rostro, sus ojos marrones se veían más fuertes de lo que habían estado en días.
—¿Una vuelta, justo ahora? ¡Papá se pondría furioso! —reí, solo para detenerme cuando me di cuenta de que estaba siendo completamente serio.
—Lucas, las fronteras no son seguras.
—Entonces es bueno que quiera sacarte de las fronteras. —colocó el casco en mis manos antes de dirigirse hacia su moto.
El motor rugió al ponerse en marcha bajo su tacto.
Comencé a negar con la cabeza, solo para ver que esa mirada determinada regresaba a sus ojos y la puerta de la oficina de Alfa se abría apresuradamente desde atrás. Si iba a irme, sería ahora.
Mordisqueé mi labio inferior, coloqué el casco sobre mi cabeza y seguí sus pasos, colocando mi pierna sobre la parte trasera de la moto