Punto de vista de Héctor
Era tarde, o temprano… igual, seguíamos sin haber pegado un ojo y estábamos sentados en la oficina de Bruno mientras él nos mostraba los límites de sus tierras en un mapa.
Elena se había ido a dormir hace horas, y aún no había tenido la oportunidad de hablar con ella a solas. No estuvo en la cena y antes de irse a descansar arriba. Las dos me estaban ignorando: Elena y Katia, al igual que Carla.
Tenía tantas preguntas… ¿Cómo se encontraron? ¿Cómo descubrió que Bruno era su padre? ¿Cómo habían sido separadas al nacer?
—¿Carla, eres tú? —escuché a Bruno llamar hacia un crujido en las escaleras.
—Sí, padre… —eché un vistazo al reloj de pie en la oficina de Bruno. Las 3 de la madrugada… debería haber regresado hace horas.
También estaba tratando de evitarme.
Bruno no la presionó para que entrara, y eso solo aumentó mi frustración. Quería verla… asegurarme de que estuviera bien. Fue arrojada de un lado a otro en el campo de batalla, aunque luchó con valentía, aunque