32
Mijail se tambalea, se lleva una mano a su cabeza, se gira y comienza a pegarle a su coche, toma algo del piso y de la nada revienta los vidrios de su auto. Trato de pararlo, pero, Mijail esta cegado por la ira.
—Todas tus desgracias son mi culpa—dice él derrotado, no puedo negar ante sus palabras, porque realmente tenía razón—Yo te he desgraciado la vida, antes de mí solo eres luz, una luz que yo quería, pero, mi oscuridad la consumió…yo…lo siento tanto, Victoria— se avecina hacia m&