**SANTIAGO**
—Esta noche, el show es diferente —respondo con una sonrisa
—Leonardo da un paso atrás. Literal, como si el suelo bajo sus pies de pronto se hubiera vuelto inestable. Lo miró fijamente mientras murmura, con esa voz que apenas le sale del pecho:
—Espera… yo… no sé bailar.
No digo nada. Solo lo observo mientras mete la mano al bolsillo con apuro, saca el celular y lo desbloquea con una torpeza que me resulta casi tierna… si no fuera patética. Sus dedos vuelan sobre la pantalla, como si escribir algo, cualquier cosa, pudiera salvarlo de lo que se viene.
—¿Y qué estás haciendo? —pregunto al fin, sin disimular la curiosidad burlona que me vibra en la voz.
—Buscando tutorial de baile tipo Magic Mike —responde, sin levantar la mirada.
Lo dejo ahí, dándole espacio a su ridículo. Lo miro unos segundos que se sienten eternos, y no puedo evitar que una mezcla incómoda de compasión y burla se me enrede en el estómago. Me cuesta no reír.
—Y pensar que este hombre es mi rival —pienso,