C121: Quiero saber el paradero de Nadia Bennett.
Romero lo escudriñó desde su posición y solo alcanzaba a ver el perfil de un hombre alto, de traje oscuro perfectamente ajustado. El visitante se encontraba sentado con una postura impecable, observando con aparente interés los marcos de fotos familiares sobre la repisa. Había algo en su quietud que imponía respeto.
—¿Lo conoces? —preguntó su esposa, bajando aún más la voz, como si el hombre pudiera escuchar cada palabra.
Romero negó lentamente.
—No… no me resulta familiar.
—Dijo que su nombre es Rowan Kohler.
La sorpresa cruzó el rostro de Romero como un relámpago. Sus labios se entreabrieron un instante, incrédulo.
—¿Un… Kohler? —repitió, esta vez con un tono de alarma.
Ella asintió, observando su reacción.
—Sí. Pensé que tal vez tú y él tenían algún asunto pendiente… por eso lo dejé pasar. No me atreví a dejarlo esperando afuera, tratándose de un apellido tan importante.
Romero apretó la mandíbula, guardando silencio unos segundos. Sabía que los Kohler no eran una familia cualquier