122. No tiene que ver con la edad…
Ethan no estuvo preparado para la forma que ese hombre lo tomó del brazo y jaló de él.
Bradley agarró al chico del brazo para llevarlo tras uno de los furgones y entonces lo acorraló contra este para saborear su boca en un beso lleno de furia, tanto que fue incapaz de contenerse y mordió hasta que el sabor a sangre lo devolvió a la realidad.
Mucho menos estuvo preparado para ese beso que vino después tras ser acorralado por ese hombre. Fue un beso que lo hizo no solo suspirar, también lo hizo gemir y soltar un pequeño grito de dolor que hizo que su entrepierna se despertara, no podía creerlo, pero ese beso salvaje hizo que su cuerpo entero se estremecía y se sujetara a los hombros de ese hombre con los ojos cerrados y la respiración agitada.
Ethan Junior se encontraba molesto consigo mismo por la forma que había respondido al beso de ese hombre. Él debía de tener el control; sin embargo, era besarlo y perder el control.
—Supongo que he acertado…
— No tiene que ver con la edad…— asegur