97. La Sentencia Final
Treinta minutos se sienten como treinta horas. En el pasillo del tribunal, rodeada por nuestro equipo legal y familia, cada segundo arrastra una eternidad de posibilidades terribles. ¿Un error procesal? ¿Un recurso de último minuto? ¿Alguna evidencia nueva que podría cambiar todo?
El abogado Calderón intenta tranquilizarnos, pero puedo ver la preocupación en sus ojos. Incluso él, con décadas de experiencia, parece desconcertado por la interrupción.
—Probablemente es algo administrativo —dice, pero su voz carece de convicción—. Algún papeleo que necesita verificación.
Max camina de un lado a otro como un animal enjaulado. Ha recuperado esa energía nerviosa que lo caracterizaba cuando estaba construyendo el imperio empresarial, pero ahora está canalizada hacia una ansiedad que ninguno de nosotros puede controlar.
—¿Y si es algo sobre el embarazo de Isabela? —susurra Camila—. ¿Y si hay complicaciones que podrían afectar la sentencia?
Es una posibilidad que no había considerado, y el solo