Mundo ficciónIniciar sesiónLa mañana llegó con noticia que Valeria temía: Elena no se iría.
—Es temporal —explicó Aleksandr en el desayuno, manteniendo distancia respetuosa—. SVR confirmó amenazas activas. Hombres de Dmitri que escaparon están buscándola. Necesita protección hasta que puedan neutralizarlos.
—¿Y tiene que ser aquí? —preguntó Valeria fríamente—. ¿En mi casa?
—Nuestra seguridad es la mejor. Y Nikolai puede vigilarla.
—Qué conveniente. Tu amante embarazada necesita vivir contigo. Como destino.
—No es mi amante. Fue error...
—Que duró tres noches. Ya sé. Lo dijiste.
Elena apareció en ese momento, vestida en ropa deportiva ajustada que acentuaba su vientre. Sonrió a ambos.
—Buenos días, familia feliz.
Valeria apretó su tenedor







