Capítulo 24/ Hermosa y perfecta.
Los días iban pasando, las semanas venían con un sabor agridulce de paz, pero con la sensación de que algo le faltaba a Cataleya.
-Dice mi profesora que hoy leerá uno de mis poemas.-dijo Rayan ilusionado llamando la atención de su madre que estaba perdida en sus pensamientos, preguntándose donde se encontraba Frank.-¿Me has escuchado mamá?
-Oh, perdón cariño.-se disculpó Cataleya por no prestarle atención mientras caminaban por las calles de Manhattan hasta el colegio de su niño.-¿Qué me decías?
-Que hoy me darán la oportunidad de que todos conozcan mis poemas. Según mi profesora son muy buenos.-repitió Rayan con entusiasmo.
Cataleya lo miró con tristeza, pues su hijo cada vez se veía más cómodo en su nueva escuela...en su nuevo mundo, que sería apenas un lugar pasajero para ellos.
Cerrando su abrigo rojo, Cataleya se puso a la altura de los ojos de su niño, cerrando un poco más su abrigo azul que era parte del elegante uniforme. Pasó la mano por sus cabellos rojos y le dio un be