Los poderosos CEOS, por más que fuera verdad que sus hijos hubiesen fallado. No podían permitir tan horrendo trueque.
— Sergey, deja de asustar a nuestras esposas, ¿Qué diría Isabella si te escuchará hablar así? Para ella eres el hombre más extraordinario del mundo, no conoce este monstruo que guardas en tu interior.
— Serena después de escuchar a su enfurecido padre, había corrido a llamar a su madre. Sentía que las cosas se estaban saliendo de control.
Entonces el elevador se abrió y la bella y elegante mujer salió. Había escuchado un poco de la conversación.
Alina y Adriana se apresuraron a abordarla.
— Isabella, te suplicamos que hables con el CEO Ivanov, sabemos que nuestros hijos son culpables, que cometieron un error, pero no son malos hombres, no permitas que les corte las piernas... — Las mujeres tomaban de las manos a la mujer del ruso.
— !No puedo creer que estés amenazando a nuestros amigos de toda la vida, Sergey Ivanov! Mira nada más como tienes de angu