Capítulo 145 El será mi esposo.
Si bien Federico sentía que moría un poco cada día sin Elizabeth a su lado, ponía todo de sí para mantenerse en pie. Se había propuesto ocuparse por completo tanto de la búsqueda de su esposa como del cuidado de su hijo.
Los primeros días fueron especialmente difíciles, pero gracias al apoyo de su entorno, sobre todo de Adrián, logró reponerse un poco y comenzar a funcionar con cierta normalidad. No podía seguir actuando como si Lizzy estuviese muerta, porque para él no lo estaba y estaba convencido de eso.
—Sé que muy pronto mamá va a estar con nosotros —le decía a Lucas mientras lo bañaba—. Mientras tanto, voy a ocuparme yo de todo. No te preocupes hijo mío...mamá regresará. Te lo prometo.
El bebé lo miraba sonriendo mientras chapoteaba en el agua.
La escena de Federico cuidando a su hijo era tan tierna como triste. Él y Elizabeth habían decidido ser padres presentes en todos los sentidos, y eso incluía aprender a encargarse personalmente de cada aspecto del cuidado de su hijo: desd