Capítulo 41. Sorpresa e Intriga.
Mientras tanto, Francesco y Vito se dedicaron a atender a un grupo significativo de personas interesadas en establecer relaciones comerciales con la prestigiosa Casa de Joyas Vannucci, gestionando las primeras aproximaciones y sentando las bases para futuras negociaciones.
Entre la multitud de interesados, se distinguían dos grupos principales: aquellos que buscaban la creación de piezas únicas y personalizadas que reflejaran su individualidad y estatus, y los comerciantes que vislumbraban la oportunidad de incorporar las codiciadas creaciones de la Casa Vannucci a sus propios inventarios, expandiendo así su oferta y atrayendo a una clientela exigente.
En contraste con la frenética actividad de Francesco y Vito, Tobías se encontró con un panorama menos alentador. A pesar de sus esfuerzos, solo logró concretar un acuerdo comercial y, aunque el cliente no pertenecía a las grandes ligas de la joyería, Tobías lo consideró un modesto pero necesario avance en ese momento.
—¡Por todos los ci