Capítulo 25: Amenaza.
Aquella nueva mañana Arianna se sentía de buen humor. Su nuevo y lujoso consultorio privado, estaba a punto de ser terminado. Dentro de unos meses su investigación sobre el alzhéimer estaría completa, y esperaba que esta arrojara los resultados esperados y pudiese combatir directamente a aquella enfermedad tan triste. Todo estaba marchando a la perfección, en el hospital en donde trabajaba cada día las cosas parecían también haber comenzado a mejorar; habían recibido equipo médico e insumos nuevo de parte de un donador anónimo y los pequeños pacientes que repentinamente habían enfermado de una aparente pulmonía de la noche a la mañana, comenzaban a recibir atención de primera calidad gracias al misterioso empresario que había decidido apoyarlos en medio de esa crisis.
Ese día era su descanso después de varias semanas sin poder hacerlo bien, y por la tarde tendría que llevar a su regordete gato al veterinario, y después de un buen desayuno estaba lista para comerse al mundo.
Sin embarg