Sasha

El resplandor de la luz envolvía todo a nuestro alrededor, pero sabía que eso no era suficiente. La criatura, la entidad que habíamos despertado, no era simplemente una amenaza física. Era una fuerza primordial, un residuo de un tiempo anterior a todo lo que conocíamos. Y, sin embargo, sentía que no era invencible. No podía ser invencible. No frente a lo que representábamos.

Cerré los ojos un instante, buscando reunir mis pensamientos. Mi poder burbujeaba dentro de mí, pero necesitaba canalizarlo, usarlo con sabiduría. La luz que me rodeaba no era simplemente una herramienta de destrucción, era una parte de mí, una manifestación de mi voluntad. Y era esa voluntad la que iba a determinar nuestro destino.

Levanté los brazos, una ola de luz escapando de mis palmas como una descarga eléctrica. La tierra bajo mis pies tembló aún más, las sombras retorciéndose y aullando como criaturas en sufrimiento. Era una batalla de esencia, una lucha entre las tinieblas y la luz. Una guerra que n