POV: Cinthia Carranza
La vi marcharse.
Vi cómo esa pobre ilusa de Aslin arrastraba sus maletas por el pasillo, con los mocosos detras . Creía que estaba ganando… que escapaba con dignidad. Pero lo que no sabía era que estaba huyendo justo donde yo quería.
Directo a la boca del lobo .
La imagen era perfecta.
Su derrota.
Mi victoria.
Me apoyé en la baranda del segundo piso, justo donde sabía que me vería si se atrevía a mirar atrás. Pero no lo hizo. Qué cobarde. Qué débil.
Sonreí. Una sonrisa lenta, venenosa, llena de esa satisfacción que solo se siente cuando se gana algo que parecía imposible.
La foto funcionó.
Después de todo, ¿quién mejor que yo para manejar la verdad como si fuera plastilina? Una edición aquí, un corte allá… y listo. Una imagen lo suficientemente real como para destrozarla desde adentro.
Y lo logré.
Aslin estaba fuera.
Por fin me deshice de ella.
Saqué el teléfono y marqué sin pensarlo. Alexander contestó rápido.
—Ya se fue —dije sin saludar, casi sin respirar, co