Cap. 102: Amistad sincera.
La sala de juntas de Al Fayed Group mantenía su estilo elegante y frío: ventanales altos, mármol pulido, y una mesa larga que olía a poder y decisiones millonarias.
April se acomodó el blazer con manos firmes, aunque por dentro cargaba un nudo de tensión. Logan iba a su lado, serio, con el rostro enfocado como pocas veces.
Justo antes de abrir la puerta, él se inclinó hacia ella.
—Te voy a defender, April. Nadie va a tocarte. Ni con palabras, ni con acusaciones.
Ella lo miró y asintió.
—Gracias Logan, pero no vayas a cometer una locura por salvarme yo soy inocente.
Logan le besó la mejilla y le habló al oído.
—Por ti soy capaz de lo que sea, incluso de ir a prisión.
April sintió que el corazón le latía con fuerza al escucharlo, quiso rebatirle pero la puerta de la oficina se abrió.
Entraron.
Al Fayed ya estaba en la cabecera, revisando documentos con sus lentes a mitad de nariz. Su rostro era una muralla de neutralidad.
—Señor Montgomery. Señorita Collins —dijo sin emoción, señal