Capítulo 57
Luciano esperó a Vicente en la sala de la mansión. a pesar de la amenaza de Alejandra, estaba relajado, aunque ansioso porque quería respuestas, conocía a Vicente a duras penas tenía una novia, no lo imaginaba con amante.
Cuando su amigo llegó, lo recibió con un comentario bromista en medio de risas.
—A ver, cuéntame —dijo Luciano, sirviéndose un trago—. ¿Quién es esa mujer misteriosa de la que hablan?¿que mujer rompió tu corazón de hielo ?
Vicente se tensó de inmediato. Se rascó la nuca y sonrió nervioso, esa mujer era Laura, su hermana y no podía decírselo.
—Eso es mentira, Luciano. Alejandra inventó todo, Terminamos porque ella es muy celosa, me quería controlar y yo no voy a vivir con una mujer así.
Luciano lo miró fijamente.
—¿Seguro? Porque me vino a decir que, si no te casas con ella, su padre va a desatar una guerra contra los Ferrer.
Vicente tragó saliva.
—No es verdad, está desesperada por casarse, te lo aseguro.
Luciano se acercó, le puso la mano en el hombro.
—