Diana vio el último golpe violento que Aris le dio al macho al que había retado a pelear y casi siseó al ver que le daba una patada final enviándolo al suelo de un golpe seco.
Todos estallaron en aplausos como unos salvajes y ella miró a su alrededor indignada.
—¿Que demonios...?
Una risita a su lado la alertó y notó que Zakiel estaba a su lado.
—¿De verdad aplauden eso?
—Es un combate cuerpo a cuerpo, Di. Obviamente todos estallarán en vítores por el ganador.
Diana no estaba segura de eso.
Miró a su alrededor notando que las que más aplaudían eran las hembras, sobre todos las del Este.
—Solo quieren llevárselo a la cama. Por eso tanto show —refunfuñó Diana gruñendo.
—¿Qué? ¿Estás celosa? —se burló su mejor amigo y ella enseguida entornó los ojos molesta comenzándose a dirigir hacia la arena.
Enseguida todos los ojos de las personas a su alrededor se clavaron sobre ella y Diana apretó la mandíbula incómoda.
De repente su mirada se encontró con los cautivadores ojos verdes que tanto l