Capítulo 15

Livia

No aparté la mirada de él. Pude ver cómo su semblante se fue endureciendo poco a poco, mostrando que no le hacía ni puta gracia que le hablara de esa manera y no pidiera perdón por la acción tan descuidada de la noche anterior. Era un controlador, y sentir que me le estaba saliendo de las manos no le gustaba. Para Matteo Vescari, todos éramos piezas de un juego que él podía mover a su favor y desechar cuando ya no le servían.

—¿Crees que te tendría aquí si solo te viera como una pieza? —se acercó más a mí. No me moví, permanecí quieta con ambas manos a mis costados—. ¿En verdad crees que, si no te considerara valiosa, no te habría regresado con tu padre?

Tomó mi mentón entre sus dedos e inclinó su cabeza para acercarse más a la mía.

—A mí no me importa si quemas la puta casa con todos dentro. No me interesa lo osada que se te considere por lo que hiciste o dijiste. No estoy molesto por eso. ¿Quieres sacar todo lo que te ahoga por dentro? Hazlo. Pero no pongas en riesgo tu vida.
Sigue leyendo este libro gratis
Escanea el código para descargar la APP
Explora y lee buenas novelas sin costo
Miles de novelas gratis en BueNovela. ¡Descarga y lee en cualquier momento!
Lee libros gratis en la app
Escanea el código para leer en la APP