Yura caminaba al frente con una sonrisa orgullosa, como si hubiera estado esperando ese momento desde hacía mucho. Nolan, con su semblante reservado de siempre avanzaba detrás de ella con Danika a su lado, pasaron un par de minutos antes de que llegarán a la casa cuando abrió la puerta. Yura anunció sin ningún tipo de reserva.
—¡Me he encontrado a Nolan y su novia en el camino! ¡Van a cenar con nosotros!
En el momento que dijo eso, una niña apareció en el pasillo mirando con ojos curiosos y divertidos.
—Tío Nolan —murmuró y en el momento que lo vio corrió hacía él —¡Tío Nolan!
Al llegar se lanzó hacía él, Nolan la atrapó con sus reflejos al instante, la niña sonrió al estar en sus brazos, Danika observó todo, se dio cuenta de la mirada tierna con la que veía Nolan a la pequeña.
—Hola Charlie, ¿cómo estás?
—Feliz de que estés aquí, tío Nolan, mi mamá da muchas ordenes —suspiró.
—¡Oye! —le regañó Yura.
Justo detrás venía un hombre alto de cabello castaño.
—No deberías correr as