Mundo ficciónIniciar sesiónDYLAN VETTEL
—Hay una chica que insiste en pasar a verte —dijo la enfermera que había estado cuidando de mí las últimas horas después de despertar—. Llegó contigo en la ambulancia, se llama Jazmín.
—Ya dije que no quiero visitas —contesté tajante con la mirada perdida, recordando ese momento en medio del fuego. Ese hombre, el del auto azul era Bryan, escuché a Jazmín llamarlo, vi su dolor, su anhelo. El fantasma había regresado y eso… ¿Dónde me dejaba?
Sería más fácil dejarla ir. Que fuera feliz con él. No valía la pena seguirme involucrando más sentimentalmente y menos si su amado pensaba matarme, no iba a terminar con el corazón roto solo por no saber hasta dónde parar.
—¿Estás bien? —preguntó la enfermera inclinándose hacia mí, preocupada—. ¿Te duele mucho?







