PARTE DOS DE MI LUNA ES MI ENEMIGA, PUEDE CONTENER SPOILERS DE LA PRIMERA PARTE Bella es una cazadora de hombres lobo, resentida con el mundo, cree que es su misión cazarlos y hacer que paguen por como tratan a los humanos, pero todo cambiará cuando conozca a Alfa Michel, su último encargo. Un hombre lobo con cuerpo de dios griego, que hará temblar sus principios. Más aún cuando ambos se den cuenta de que son compañeros destinados. Pero. ¿podrá el amor vencer una traición semejante? ¿Qué pasará cuando Alfa Michel descubra que es una espía? ¿Podrá aceptarla como compañera? descubre la fascinante historia de Bella y Alfa Michel.
Leer másEsta es la misión más difícil que me han encargado hasta ahora. Llevo más de un año trabajando para Los Cazadores, la organización más famosa y mejor reconocida en lo que a caza de hombres Lobo se refiere. Más de un año desde que mi madre me confesó mis orígenes y me hizo sentir asqueada al decirme que era fruto de una relación extra matrimonial con un hombre lobo. ¡Yo! Y ese maldito cobarde que fue mi padre, que por lo que sé ya ha muerto, nunca se dignó a reconocerme, ni siquiera se planteó venir a verme, simplemente se desentendió de mi,y de mi madre. Por eso, odio a los lobos. Se aprovechan de los humanos, los usan, y los tiran y son solo piezas en su gran partida de ajedrez. Pero ahora yo he decidido darle la vuelta a la situación, ahora cazo a esos despreciables seres, y los llevo hasta el cuartel secreto de los cazadores, donde son juzgados y enjaulados, para que no utilicen a más humanos.
Pero por primera vez desde que llegué, estoy muy nerviosa, esta misión es extremadamente difícil. Soy la asistente personal del Alfa de la manada Cumbre Helada, y yo había pensado que este bastardo quería una secretaria, pero al parecer no, tengo que ser su sombra. Ni siquiera durante la noche me deja irme a mi propia casa, no, debo ocupar un cuarto en su manada, cerca de él, para ayudarlo con las tareas urgentes de primera hora.
Y lo que es peor, ese arrogante bastardo de ojos azules como el hielo y anchos hombros, me mira como si fuera capaz de leerme la mente; hay veces que llego a creer que lo ha conseguido, y sabe que mi organización de cazadores de hombres lobo me ha infliltrado en este lugar para que pueda servirles en bandeja al Alfa.
He de reconocer que tiene un físico imponente, ojos penetrantes, rostro esculpido, hombros anchos, y unos brazos que parece que pueden levantarte del suelo sin hacer esfuerzo… si no supiera que es un hombre lobo, pensaría que es un auténtico atleta de la época romana, porque ese cuerpo parece hecho para desear el pecado… pero no, yo soy Bella, la cazadora, y estoy en esta casa para cumplir la misión que se me ha encomendado: reunir información sobre el Alfa, conocer sus costumbres, y entregarlo a los cazadores en el momento justo. Esta es la misión más difícil e importante que me han encomendado hasta ahora, y no quiero liarla… no, necesito estar centrada.
Miro mi reloj de pulsera, compruebo que es la hora a la que debo llevarle el almuerzo al Alfa, y me levanto, alisando mi falda gris de tubo, y mi blusa blanca. De una nevera que hay en el enorme despacho que precede a la sala que ocupa el Alfa, saco un pequeño recipiente de cristal, vuelco su contenido en un plato y aliño la ensalada mientras pienso en como un hombre de ese tamaño es capaz de sobrevivir con una mísera ración de ensalada. Si por mi fuera… yo comería todos los días filete, o hamburguesa, pero evidentemente, sigo las indicaciones que la última asistente del Alfa me dio antes de dejar su puesto para ir a atender a sus padres enfermos en un pueblo cercano.
Me encamino hacia su despacho con el plato perfectamente preparado, los cubiertos alineados en los laterales, y abro la puerta sin llamar, ya que aparentemente le molesta que lo interrumpan cuando está trabajando. Abro, camino dos pasos, y siento como el plato se vuelca contra un duro obstáculo que se ha interpuesto en mi camino.
- Señor.- digo abriendo mucho los ojos.- lamento profundamente el incidente, no sabía que estaba usted a punto de salir.
- Bella.- dice él con esa inexcrutable voz que enciende todas las alertas de mi cuerpo.- ha sido culpa mía por no avisarla de que no me sirviera el almuerzo este mediodía.
- ¿Ah, no?.- digo mientras intento limpiar la enorme mancha de su camisa blanca.- No hay ninguna cita en la agenda.
- Eso es porque no tengo una cita profesional, Bella.- dice él sonriente.- sino personal, con mi prometida.
Y diciendo eso se da la vuelta y comienza a desabrocharse la camisa. ¡Cielo santo! Esos músculos que están quedando al descubierto al quitarse la camisa, ¿son naturales? Si parecen recreados por ordenador…
- Bella, Bella, ¿me está escuchando?
Yo vuelvo a conectar mi mente a mundo real, y dejo de observar con descaro el cuerpo de este hombre.
- Si, por supuesto.
- Le decía que llame al restaurante, y pida que avisen a mi prometida de que llegaré tarde.
- Por- por supuesto, señor.- digo con la voz temblorosa.- ¿dónde iban a comer?
- En Sant’Angelos, y no tiembles.- dice con voz amable.- ha sido un accidente, ¿no, Bella? Solo llama para que limpien la moqueta, y lleva la camisa a la tintorería.
Llamo al restaurante para dar el aviso que este hombre me ha pedido, y mientras un amable camarero coge mi comanda, escucho ciertos ruidos en el auricular. Si, la organización debe de estar escuchando mi conversación, porque sé que ese ruido es el de un micrófono al captar mis palabras. No sé cuanto va a durar esta misión, pero si que sé que estar cerca de este Alfa con cuerpo de Dios, va a ser todo un reto para mi.
El sanador que trae uno de mis hombres, pertenece a los cazadores, es uno de sus médicos, y en cuanto aparece, puedo ver el destello de odio en sus ojos. ¡Maldita sea! Sé de sobra que este canalla no va a curar a Cathy, y ella está tan débil, que dudo que pueda soportar que la llevemos hasta nuestra manada, o hasta la ciudad. No, el sanador más cercano está demasiado lejos para que le sea de utilidad a Cathy.- Medicucho.- digo con la voz más amenazante que encuentro en mi garganta.- encárgate de curar a esta mujer, porque si ella muere…Me corta, antes de dejarme terminar, y con voz socarrona dice delante de mis hombres:- Déjame adivinar, si ella muere, ¿yo también?Me gustaría aplastarlo con mis propias garras, pero me contengo por Cathy, ella necesita un sanador, y éste es el más cercano con el que contamos. Me fijo en él, y veo que lleva una alianza en su dedo anular, los que indica que está casado.- No, si ella muere, tu esposa también muere. Está unos metros más allá, con mis
- Señor.- dice uno de mis hombres desde lo alto de la escalera.- tenemos novedades sobre el otro grupo de soldados que envió por separado.Me tenso en cuanto escucho su voz desgarrada, sé que algo no va bien, y decido que no puedo hacer pasar a estas dos mujeres por otro trauma aparte del que acaba de terminar para ellas. Ésto tengo que verlo yo solo.- Chicos.- digo señalando a los hombres que están conmigo en los calabozos.- quiero que escoltéis a Bella y a Vera fuera de este lugar, a un vehículo seguro que las lleve a mi casa en la ciudad, he blindado el edificio de tal forma, que si alguien quiere entrar, va a tener que bombardearlo.- Si, señor, como mande.- Señor.- dice otro de ellos con un gesto preocupado.- ¿qué hacemos con los cuerpos?La realidad es que me gustaría exhibir los restos de Beau Anders y gritarle a estos cazadores que acabarán como él si se interponen en el camino de mi familia, o en el de mi compañera destinada, pero no quiero echar más leña al fuego, y sé que
Cuando Alfa Michel centra la mirada en mi, y me llama por mi nombre, siento una inmensa gratitud hacia la diosa Luna, que me ha permitido vivir el tiempo suficiente para llegar hasta aquí. De verdad pensaba que iba a morir en este asqueroso agujero en el que el mundo no parece ser el mismo, y en el que no hay normas, ni moral; solo las leyes de Beau Anders.Me lanzo hacia Alfa Michel, y al principio me siento rara, el contacto con otro ser vivo, después de lo que he pasado en esta celda, es extraño, y no estoy segura de poder volver a sentirme segura si no tengo un cuchillo entre los dientes; después de un rato, las cosas s suavizan, y recuerdo que este lobo es mi primo, y que él siempre me ha protegido, y por tanto, no va a hacerme daño.- Vera.- repite él como si no pudiera creer que estoy ante sus ojos.- ¿has estado aquí todo este tiempo?- Si, el cerdo de Beau Anders me encontró, me drogó y me encerró en esta celda hasta que Bella consiguió sacarme de ese horrendo agujero.- Pero,
Llevamos más de una hora dentro del cuartel general de los cazadores, y aunque la mayoría de los presentes han preferido rendirse pacíficamente, e incluso indicarnos donde se encuentran ubicados sus dirigentes, hay una pequeña cantidad de personas que están luchando contra nosotros. No son demasiados, pero van muy bien armados y tienen entrenamiento militar, así que nos está costando avanzar.- Cathy.- grito en un momento de especial jaleo, cuando veo que otra tanda de cazadores se abalanza sobre nosotros.- ve con algunos de mis guardias, y busca a Bella.- Está bien.Sé que está asustada, porque aunque Cathy es increíble, es normal que sienta miedo al ver como los cazadores nos apuntan con sus armas, y al escuchar los sonidos de dolor de los lobos a los que han conseguido dar. Cathy es valiente, luchadora, y una loba formidable, pero no creo que haya estado antes en una batalla como ésta, conozco muy bien a su padre, mi tío, y sé que si por él fuera, Vera y ella seguirían encerradas
Mi puerta se ha abierto, y por una vez no viene a buscarme el monstruo que ha estado torturándome desde hace meses. Ni siquiera he sido capaz de distinguir el olor de alguien nuevo al entrar, y eso que mi olfato es el de una loba. No comprendo qué me ocurre, mis sentidos están atrofiados, apenas puedo moverme, y cuando al fin levanto la cabeza en busca de la voz de Bella, mi compañera de celda, ella me mira como si tuviera varias cabezas. La miro fascinada, porque durante muchos días, al escuchar su voz, me reconfortaba, pero no la imaginaba así. Es muy hermosa, y muy valiente, y ¿acaba de llamarme por el nombre de mi hermana? ¿Es posible que esta chica conozca a mi hermana Cathy? ¿O es todo un truco más de Beau? Porque ese monstruo es capaz de cualquier cosa.- ¿¿Cathy??- ¿Tú conoces a Cathy?- Cathy, la conocí hace unas semanas en el restaurante Sant’Angelos. Mientras almorzaba con mi jefe.- ¿Tu jefe es Alfa Michel? Porque es la única persona que conoce Cathy que vaya a ese lugar
Mi loba está furiosa, le ha dado una oportunidad a Beau, y él la ha desaprovechado. Quizá Beau crea que ha ganado esta batalla, pero mi cuerpo animal sana tan rápido, que ya apenas noto el lugar en el que se produjo la laceración.Beau me mira con sorna, es tan sádico, que está esperando a que me desangre delante de sus ojos; pero al contrario de lo que él espera, mi cuerpo recupera fuerza, incluso se están cerrando las heridas del accidente de coche. ¿Cómo es que no he sido capaz de convertirme antes? Debería haber recordado que a Alfa Michel le pasó igual… los lobos sanan antes en forma animal, es una de las cosas más importantes que debo recordar de ahora en adelante.Me acurruco, fingiendo encontrarme mal, esperando el momento perfecto, y cuando un gran golpe en el piso superior distrae la atención de Beau, me lanzo directamente a su yugular.Puede que mi parte humana esté un poco horrorizada por lo que he hecho, pero mi loba gruñe de satisfacción al escuchar como se desangra baj
Último capítulo