POV Alex
Era una tarde gris, y el peso de lo que había pasado en el juzgado aún se sentía en el aire. Aria no dejaba de frotarse los ojos, como si no pudiera sacudirse la sensación incómoda de todo lo que había ocurrido. Había sido un día largo y, aunque yo trataba de mantenerme tranquilo, por dentro todo estaba en caos. El encuentro con su madre biológica había dejado a mi pequeña en un estado que no sabía cómo manejar. Sus miradas confusas y asustadas, me dolían más de lo que me gustaría admitir.
Decidí que necesitábamos un respiro, algo que la sacara de ese lugar oscuro, algo para distraerla. La llevé al mall, donde sabía que había un pequeño parque de juegos para niños. La idea era simple: dejar que se olvidara, aunque fuera por un rato, de todo lo que había pasado.
Cuando llegamos, la vi iluminarse de inmediato, como si todo lo demás dejara de importar en cuanto vio los toboganes y las figuras de colores brillantes. Me costó un poco que se soltara, ya que aún veía algo de miedo