Raven
— ¡Señora, señora, esta esclava está mal de cabeza, comenzó a atacarnos sin razón! ¡Casi ahoga a Lorena! – la chica se tiró al suelo y armó todo un drama haciéndose la inocente.
Yo solo me quedé parada en mi sitio, mojada y también herida.
De repente una exclamación se escuchó y todas las miradas se fijaron en la doncella que salía del agua.
Yo también la miré. Parecía una cosa horrenda.
Toda la piel enrojecida y grandes ronchas asomándose por toda la cara, el pecho y las manos.
Yo sabía que su cara de agonía dolorosa no era fingida. Mis manos también estaban heridas y donde había caído las salpicaduras, ardía a morir.
— Revisa el agua y ayúdenla a salir— Lady Amalia le ordenó a una señora mayor que estaba a su espalda.
La tal Lorena lloraba ahora a moco tendido, sin olvidarse de darme una mirada rencorosa, y vi cómo las doncellas que venían con la hermana del Alfa, también me miraban raro.
— Son sales de Callum— fue el veredicto de la doncella mayor.
No tenía ni idea de que e