Mundo de ficçãoIniciar sessão—Te ves horrible — Caterina observa su largo vestido color magenta de cuello redondo que cae con delicadeza desde su cintura hasta sus tobillos y se traga la indignación con fuerza.
Ella se encuentra en el centro del despacho de don Pietro, detrás de un escritorio caoba que domina la habitación: macizo y pesado. Está sentada en una gran silla, confortable e imponente, que perteneció a su padre, Don Benedetto y luego a su tío, Don Pietro.
El despacho es sombrío, tiene impregnado un olor a cuero y tabaco, las paredes están revestidas de madera oscura, al igual que los acabados, pulidos hasta el brillo, con algunas paredes grises y el techo alto que da una sensación de solemnidad, casi como si estuviesen en la peque&nti







