-Landon, estoy en el país desde ayer, necesitamos hablar, tenemos un problema bastante serio, no sé qué hacer, es con el señor Vitale, necesito que vengas a casa hoy mismo, con este mensaje era seguro de que Landon volvería a la casa.

-Esta noche estaré de regreso, espero y no hayas provocado la ira de Omar Vitale.

Marian no contestó a ese mensaje, eran las dos de la tarde, Marian no había comido nada durante el día, se sentía agotada.

-Señora, le traje esto, noté que no ha comido nada, es una ensalada cesar, espero le guste, espero y no se moleste por tomarme esas atribuciones, dijo Naty.

-Ay Naty, gracias, la verdad tengo la cabeza en otra parte, no he tenido tiempo de comer nada, muchas gracias, esta ensalada es de mis preferidas.

Naty salió de la oficina con una sonrisa en su rostro, realmente apreciaba a Marian y estaba feliz de que sacaran a María de la empresa, desde que había llegado se había encargado de hacerle la vida imposible a todo el mundo.

Así transcurrió la tarde, Oma