Al terminar el día laboral, las dos chicas salieron juntas del edificio, ambas caminaron hacia el auto que estaba estacionado frente de la empresa, era el auto personal de Landon.

Omar, que iba caminando tras las chicas, ya que Gustavo lo esperaba al frente para llevarlo a su mansión.

-Hola mi amor, que bueno verte de nuevo, gritó Landon, para que Omar notara su presencia, no porque pensara que su esposa le parecía atractiva, sino para dejar una apariencia de que eran un matrimonio perfecto.

-Señor Vitale, que bueno verlo, dijo Landon extendiendo la mano, tomó la mano de su esposa y la acercó a él, intentando darle un beso en sus labios al que Marian con un movimiento rápido esquivó.

Landon le sonrió en forma de amenaza, ella sabía que aquella sonrisa representaba problemas, él tomó su brazo fuertemente haciendo que Marian hiciera un rostro de dolor.

-Que tal señor Drope, dijo Omar intentando que el hombre soltara el brazo de Marian.

Permítame decirle que usted me ha dado la mejor ide