Capítulo 56. La mujer que volvió… distinta.
Ares tardó dos segundos en reaccionar.
—Lena… —Se levantó.
Ella caminó hacia la mesa con un andar seguro, demasiado seguro.
—Me vine porque extrañaba la casa… y estar con mi familia —respondió con un guiño—, sobre todo a Harry, por eso no pude esperar los dos días.
Ares se levantó; su silla raspó el mármol con un sonido áspero. Su rostro era una máscara de alivio fingido, pero sus ojos grises eran un túnel de fría certeza.
—Lena —dijo Ares, usando el nombre legal de su exesposa.
Ese que seguramente la verdadera Lena esperaba escuchar para confirmar su identidad.
—Creí que llegarías más tarde.
Lena se detuvo, confundida. Quería que la llamaran "mi amor" o "Lyanna", el nombre que Ares había usado en la intimidad.
—Sí, bueno, la urgencia de mi hijo me hizo adelantar el viaje —respondió ella, forzando una expresión de preocupación maternal.
Eleanor la observó con detalle, como un halcón.
—Te ves… distinta, querida.
La mujer soltó una risa leve.
—¿Para bien o para mal?
—Solo distinta —repi